Las amistades peligrosas, escrita por Pierre Choderlos de Laclos, nos sitúa en la Francia del siglo XVIII. Pone en entredicho la moralidad de la época, que parece se ve superada por las pasiones representadas en las altas clases sociales. La moralidad vista desde la perspectiva masculina y femenina, que a pesar de su aparente igualdad, en el caso de la antogonista, la Marquesa de Merteuil aun tiene que ser menos expuesta con sus hábitos.
En la película vemos el claro reflejo de pensamiento de la época que se emancipado ya de la religiosidad y que se ha volcado en temas de carácter social, filosófico y sobre todo, de la condición de el “nuevo hombre libre”. Un alto grado de erotismo marca la cinta y la novela, que en la época tuvo grandes críticas por los sectores más ortodoxos. Literariamente vemos la evolución del amor cortés a la seducción y la exaltación de la violencia psicológica. Sin duda una obra maestra que ha pasado a la historia como una joya de la literatura, que debe su permanencia debido a la vigencia temática, y de alguna manera por su efecto moralizante, ya que finalmente la historia “castiga” a los que transgreden su propia naturaleza y la libertad del prójimo .
Lo que me pareció interesante fue que la película parece atemporal, parece que venimos arrastrando la escala de valores desde el siglo XVIII, bien podría aplicar la situación a la actualidad, casi puedo asegurar que tanto mujeres como hombres gozamos de esas “licencias” morales, que sin embargo, siempre están matizadas de una doble moral que termina por excluir y satanizar a los libre pensadores; una paradoja y una crítica, adornada con un bello lenguaje literario (en caso de la novela en formato epistolar) y plástico (en el caso de las películas).
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