miércoles, 7 de marzo de 2012

Reportes 2do. parcial. Fa Cardona

Todas las mañanas del mundo

Realizada en 1991, ambientada en el siglo XVII.
Un magnífico filme que nos remonta a la Francia instalada en su esplendorosa época del preciosismo francés, que se caracteriza por la desmesurada afección emotiva que sufrían ante el entorno, el refinamiento, la intelectualidad, la moda, la ostentación y que deja asomarse al padecimiento de la melancolía crónica que llegará en el romanticismo. Envuelta en la exquisita música de  Jordi Savall Todas las mañanas de mundo es un reconocimiento a la autenticidad de la época que fue cuna y origen de muchas de las costumbres, formas y usos que perviven hasta hoy.   

Basada en un personaje real sobre el violagambista Sainte-Colombe, del cuál se tienen pocas referencias históricas provocando que el guionista diera juego a la imaginación para la construcción de la historia. Dicho personaje se nos va dibujando como un melancólico, romántico, constante, disciplinado, enamorado de la música, creador, interprete,  sumamente sensible y virtuoso que define con creces la palabra Artista, como un ser que se experimenta en la completud  de su ser. Es entonces cuando aparece el personaje que representa el conflicto y la tragedia, un muchacho vanidoso, Marin, que logra hacerse alumno de Comlombe  y que lucha por dejar de ser virtuoso para convertirse en artista. La historia se vuelve compleja cuando el indispensable tema del amor entra en escena,  Marin y la hija de Combe establecen una difícil relación que no prospera sumiendo  a ésta en una depresión que la llevará al suicidio.  Recurrentemente aparece el tema de la muerte como parte del pesar de los seres humanos, su aceptación y su sublevación se vuelve esencial en el filme para entender el papel del artista como transformador de la experiencia humana en experiencias sensibles a través de su arte.
El clímax llega con la plástica del montaje, cada encuadre, cada secuencia, son reconstrucciones de cuadros de la época. Es un viaje  al barroquismo, al claroscuro, la arquitectura, el vestuario, al bodegón, a la perspectiva; con una iluminación magistral, Todas las mañanas de mundo logra adentrarnos en las imágenes, siendo estas de tal fuerza expresiva que podríamos carecer del diálogo sin sacrificar el discurso eje.


Vatel

Basada en un personaje real quien fuera el cocinero del príncipe de Condé quién fuera nombrado para organizar las fiestas dedicadas al Rey Luis XIV. Nos ofrece una perspectiva del interior de la corte francesa, y su artificio. Recreada en 1671, en el palacio de Chantilly que da nombre a la famosa crema inventada por Vatel. El filme es una puesta en escena acerca de las puestas en escena que exigía para sí el rey sol, autoproclamado como centro del universo; narra la exageración, la suntuosidad, las convenciones, las innovaciones gastronómicas, tecnológicas, todo, en pro de la satisfacción a la banalidad del rey, actitud que provoca en el protagonista el deseo de defender la dignidad de su trabajo aun cuando estor representa un rompimiento de las convenciones de una sociedad sumamente jerarquizada; tal conflicto llevará a Vatel al suicidio cuando descubre que fue usado como objeto de cambio, apostado en una partida de cartas entre Condé el y Rey y, que a parir de ese momento sus servicios quedaban conferidos al Rey, casi en calidad de esclavo; la historia real cuenta que Vatel ciertamente se suicidó cuando el día de la cena  el pescado del platillo principal no llegó. 

De una manera sutil, la película muestra la situación de la social y económica;  desvela la gran brecha entre las clases sociales y la carestía de recursos incluso en las esferas altas, esto refleja cuando Vatel a falta de los enceres necesarios para la elaboración del banquete hacía uso de su creatividad para suplir tales carestías, dándole un giro refrescante a los banquetes.
Un discurso antimonárquico, que enfatiza las oscuras características de la corte de Versalles, su gusto por el ocio, la banalidad, el egocentrismo, el egoísmo, los vicios y la deshumanización. Es una sutil crítica al absolutismo.

La escena más significativa para mí fue en la que durante un espectáculo presentado al Rey muere accidentalmente un plebeyo que participaba en la producción, muere de asfixia, como se asfixia el pueblo y cuya muerte representa nada para los gobernantes . SNIF SNIF. 




El mercader de Venecia

Venecia del siglo XVI.  Venecia  que arrastra su protagonismo histórico en lo cultural y económico y habitada por cristiano y judíos, quedando estos últimos relegados a comunidades cerradas (ghetto) y siendo víctimas de racismo y sin embargo necesarios por los préstamos que hacían. Es el dinero lo que empieza la trama, como valor universal, como motivo de la guerra y  la corrupción humana.
Bassanio, para conquistar a Porcia pide al judío Shyloc un préstamo, es aquí cuando dos factores claves se enlazan: dinero y amor. La trama se complica cuando Antonio un antisemita es el medio para que el préstamos se lleve a término. El resentimiento social de Shyloc, representa el dolor ancestral de su pueblo, se manifiesta en necesidad de venganza y pide como depósito en garantía una libra de la carne de Antonio. Al vencer el plazo Shyloc exige si pago hasta llegar a juicio donde se terminará la validez del contrato, de ser así, Antonio pagaría con su carne. Llega victorioso de amores Bassanio quien ofrece duplicar la paga a cambio de la vida de su amigo. El rencor de Shyloc impide que se retracte; hay diálogos intensos durante el juicio, que son filosofía pura. La defensa de la fe, la confrontación de la fe y los valores contra el deseo humano, evidentemente es una escena (por parte de Shakespeare), tendenciosa ya que exalta la bondad cristiana sobre la judía, existe evidentemente un mensaje anti semitista jugando como siempre al eterno juego de lo blanco contra lo negro. Finalmente el giro magistral de Shakespeare radica en depositar en la figura femenina la clave para el buen término del conflicto: Porsia, disfrazada como juez entra en acción con complejas disquisiciones juristas y éticas, haciendo gala de sus dotes para la retórica y para el análisis lógico; cabe recordar que el formato de esta puesta a pesar de su complejidad discursiva, pertenece al género de la comedia, lo cuál hace inverosímil el desenlace. El filme pudo representar logradamente a la época, empero, ninguna producción por grande que sea, prescinde de buenos actores, sobretodo cuando hablamos de Shakespeare; el reparto se convierte en la fortaleza y eje de la película, tomando en cuenta que dos de los personajes principales, Antonio y Shyloc, representados por Jeremy Irons y Al Pacino  respectivamente, perteneces a las filas de la formación Shakespeariana.  


  
La Jóven con el Arete de Perla

Historia creada en 1999 por la escritora norteamericana Tracy Chevalier y adaptada al cine por el director británico Petter Webber “La Jóven con el Arete de Perla” es un film que nos narra la sensualidad de los colores basada en la obra “Muchacha con Turbante” o “La Mona Lisa del Norte” del barroco Johannes Vermeer. Con trama fluida y de profundos sentimientos inmersos en los personajes logra una conexión en su sentido totalmente emocional y cultural con la “Época de Oro Holandesa” misma en la que se tuvo el florecimiento de la cultura en los Países Bajos.

Película acompañada de un score cinematográfico del compositor parisino Alexandre Desplat que plasma un peculiar aire de misterio y pasión en el movimiento de los violines, pero sobre todo, en la manera en que envuelve los silencios que acompañan a esta trama durante su desarrollo, haciendo énfasis en la soledad de los principales personajes y proyectando una calidéz en los cuestionamientos del color que los personajes con coqueteo, riesgo y amabilidad juegan a preguntarse.

Con fotografía impecable y con un campo minado de emociones como son la irá, los celos, impotencia y la falsedad hacen de las imágenes un movimiento fuertemente empático dentro de la cinta.

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